¡Anticípate a cualquier contratiempo!
Cuando nos trasladamos de una región a otra nos enfrentamos a un nuevo ambiente al que no estamos acostumbrados. Hay ciertas recomendaciones que debemos considerar para tener un viaje seguro y sin imprevistos.
- Si piensas viajar al extranjero, contrata un servicio de asistencia médica o seguro de viaje, éste servirá como respaldo en caso de que se presente una emergencia.
- Procura viajar con un botiquín que incluya los productos más indispensables: como vendas, antisépticos, gasas, alcohol (preferentemente en gel), analgésicos contra la fiebre o los dolores, pomada con corticoides para calmar posibles reacciones alérgicas en la piel, antidiarreicos y antihistamínicos.
También pueden ser de gran utilidad: sobres de rehidratación oral (para diarreas fuertes y vómitos), medicamentos contra el mareo, gotas oculares, talco para evitar hongos, descongestionantes nasales, cremas de protección solar, repelentes de insectos y termómetro. El contenido del botiquín de primeros auxilios puede variar según el lugar al que te dirijas o el tiempo que permanecerás ahí.
- Si tomas algún medicamento en el momento de viajar, lleva una cantidad suficiente o incluso más de la que requieres, por si se presenta alguna eventualidad y debes retrasar tu regreso.
- Hay que prever situaciones como la ingesta de alimentos, en caso de que las medidas sanitarias sean precarias o diferentes a las acostumbradas, come frutas y verduras bien cocidas. No consumas carnes, mariscos ni pescado si están crudos o poco cocidos y evita ingerir alimentos que estén en la intemperie.
- Muchas enfermedades intestinales se transmiten a través de las bebidas, procura consumir únicamente productos embotellados, o bien, agua hervida, potabilizada o mineral.
- Evita bañarte en canales, lagos o ríos. Utiliza sandalias en lugares públicos como regaderas, pues al caminar descalzo puedes contraer una infección.
Estar preparado para cualquier imprevisto te permitirá reducir riesgos, ¡despreocúpate y disfruta al máximo tu viaje!
